Anuncian inversión social y proyectos para impulsar la llegada de turistas a la zona.
Buscando desarrollar más su potencial turístico, el departamento de La Guajira celebra este miércoles sus primeros 50 años de vida político-administrativa, tras separarse del entonces Magdalena Grande.
La Guajira está dentro de las agendas turísticas del país por sus hermosas playas amarillas, combinadas con el embrujo de sus paisajes que cambian constantemente de vegetación hasta convertirse en desierto.
María Claudia Lacouture, presidenta de ProColombia, dice que esta fecha histórica invita a reflexionar sobre el futuro de La Guajira, de su potencial, riqueza y grandeza.
La península, con 15 municipios y una población de 950.000 habitantes (el 22 por ciento indígenas), es el sitio ideal para hacer ecoturismo y etnoturismo, debido a la presencia de indígenas wayús, koguis, wiwas y arhuacos y, también, tiene un fuerte componente musical, pues el sur es cuna de vallenatos.
Hay que recorrerla de punta a punta, desde las playas de Palomino, Dibulla, Riohacha, Mayapo, Manaure, el Cabo de la Vela, Punta Gallinas, hasta la ciudad comercial de Maicao y la mina de carbón del Cerrejón, en Albania.
El trabajo de sus autoridades ha permitido el incremento de la capacidad hotelera y la entrada en operación de dos vuelos diarios en la ruta Riohacha-Bogotá-Riohacha, sin contar con las rutas terrestres, que han permitido que el flujo de turistas se incremente.
La Guajira, a pesar de su rezago en infraestructura urbana y otros problemas sociales que aún no logran ser resueltos, busca salir adelante con el apoyo del Gobierno Nacional, que ha anunciado una inversión de 55.000 millones de pesos para atender prioridades como el suministro de agua potable y seguridad alimentaria, que aquejan a las comunidades indígenas.
Según el gobernador, José María Ballesteros, esos rezagos son producto de la falta de planeación y sostiene que de las cosas malas se sacan cosas buenas, ya que existe un gran apoyo del Gobierno a la región.
“No podemos ocultar la realidad del departamento, toca darla a conocer para exigir también que nos mejoren la situación y pienso que lo hemos conseguido”, manifestó Ballesteros y anunció el inicio de obras de pavimentación, culminación de megacolegios, electrificación rural, saneamiento básico y conservación de los recursos naturales en los municipios.
Igualmente, Riohacha, su capital, espera la sanción por parte del presidente Juan Manuel Santos de la ley que le otorga la categoría de Distrito Especial Turístico y Cultural, luego de su aprobación hace pocos días en el Senado.
Desde la Administración Departamental se trabaja en dos proyectos turísticos de gran impacto para la región, según explica la directora departamental de Turismo, Katerine Iguarán.
Uno es la construcción de la marina, en las playas de la Riohacha. “Ya vamos en la segunda etapa, de estudios y diseño, lo que arrojará un sitio definido y el presupuesto de este gran proyecto, que busca abrirles las puertas a los inversionistas por todas las condiciones”, sostiene Iguarán.
La marina tendrá 150 posiciones de atraque para los yates y barcos pequeños que lleguen a la ciudad.
Otro proyecto es la construcción de un parador turístico a la altura de Cuatro Vías, entre Maicao y Uribia. Este proyecto contará con una inversión cercana a los 5.000 millones de pesos, y tendrá 30 locales entre restaurantes, tiendas de artesanías, parqueaderos, baterías de baño y punto de información.
Celebración con desfile cultural
La celebración del aniversario comenzará este miércoles con una misa, a las 9 de la mañana en la Catedral Nuestra Señora de los Remedios de Riohacha, y se extenderá todo el día, con actos académicos y culturales. Entre ellos se destacan el desfile cultural y folclórico previsto para las 3:30 de la tarde, desde las instalaciones del ICBF hasta llegar al parque Nicolás de Federmán y la reinauguración de la Sala Interactiva Étnica del Gas, en las instalaciones del Centro Cultural departamental, en la que se recrea de una forma interactiva el proceso de producción del gas natural en la región.
ELIANA MEJÍA OSPINO
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